Ya no es una niña
¡Es un mounstro!
Mire sus ojos, sus manos.
Trate de mantener una conversación.
Su suversivo diálogo es aterrador.
Parece qe son cuentos los qe va contando,
cuentos con un toqe de terror.
Demasiados pretextos,
vueltas, mareos. Vómitos.
Agarre un alfiler y pinche su buruja,
luego comienze a coser..
No es sencillo, es más práctico qe eso.
Atele las manos y pintelas de violeta,
cosa su boca con un signo de exclamación.
Abra sus ojos y muestrele
que el mundo
en realidad es de cartón.
Pinte una realidad devastadora e inofensiva en sus pomulos.
Rechace la imaginación.
Haga de ella un ente común, seriamente corriente.
No la deje dormir..................
No, no! ¿Qé hizo?
Ahora esta en el desierto, en el bosqe,
en el mar, en los montes.
No ve qe en sus sueños vuelve a nacer?
Despiertela, tirele un balde de agua hirviendo.
Qemele la piel, destruya sus pensamientos.
Hagala un poco más real.
Lo diferente acá esta mal.
Conviertala en un ser normal,
acá nadie acepta lo distinto,
no qeremos embrollos,
estamos atados a la realidad.

Y la niña desperto en llamas,
vió su mundo prendido, apagado.
Destruído.
Y se ahogo.


Si no tiene coherenciiiiia, ya fue.

ImpRovissssssse ♪